El ser humano es por naturaleza netamente sociable, pero se cometen
muchos errores al momento de comunicar nuestros pensamientos, y en la mayoría
de las ocasiones nuestro lenguaje corporal no es congruente con lo que
decimos verbalmente o viceversa, si nuestro lenguaje verbal y corporal
estuviesen directamente proporcionales, nos hiciéramos entender de forma
correcta y no existirían tantos conflictos.
De acuerdo a la calidad y atención que dispongamos en nuestra forma de
comunicarnos se forjarán mejores relaciones interpersonales con nuestras
familias, amigos, pareja y en la empresa donde laboramos. Pero ustedes se
preguntarán: ¿cómo logramos esa calidad? Pues principalmente se requiere el querer
hacerlo y tomar el compromiso para hacer los cambios, porque con la falta de esta
actitud no se puede garantizar una comunicación exitosamente efectiva.
La ventaja más importante que trae consigo el saber comunicarse de forma
correcta es que nuestros mensajes serán claros para las personas que nos
escuchen, nos observen o lean nuestras redacciones y mensajes escritos.
Es sumamente importante lograr el equilibrio en esas tres facetas,
porque no sólo nos comunicamos con las personas que se encuentran en el mismo
lugar que nosotros, existen otros medios como video conferencias, teléfono,
correos, mensajes de texto, páginas web, que son medios por los cuales también
nos comunicamos de forma diaria y que de acuerdo a la forma en que nos
expresemos dejamos la puerta abierta para la libertad que tienen nuestros
interlocutores de interpretar nuestras palabras, siendo nosotros los únicos responsables
de ellas.
La comunicación efectiva es tan importante, porque es el medio por el cual nos da la oportunidad de generar
confianza, respeto y bienestar al marcar las acciones sobre la forma en que hablamos y escuchamos, así mismo, es importante tener
presente que cada persona tiene un estilo particular de aprender y escuchar
punto a resaltar para tomar en cuenta al momento en que nos expresemos, en tal
sentido evaluaremos con quién debemos usar un lenguaje cotidiano, sencillo o
más técnico y profesional.
En caso de encontrarnos en una conversación algo crítica, tomemos en
cuenta que nuestra conversación tiene que llevarse a cabo de forma clara,
específica y coherente, si consideramos
necesario realizar repeticiones del mensaje, hagámoslo. Evitemos que la o las personas
se confundan, nuestro mensaje no puede ser ambiguo
porque aumentaremos el conflicto motivado a las dudas que surgirán, mientras
más precisos y enfocados en lo que deseemos transmitir estemos, mejores
resultados de entendimiento para ambas partes se obtendrán.
No olvidemos que la empatía y la escucha activa siempre serán factores
importantes de aplicar en cualquier conversación, podemos ser una persona
honesta, abierta, pero consciente del respeto que le debemos al que nos escucha,
nuestro lenguaje corporal deberá permanecer sin alteraciones así como el
volumen y entonación de nuestra voz.
Cuando los mensajes que estamos transmitiendo sean escritos, lo primero
que debemos pensar es que otra u otras personas lo leerán, por tanto la
información debe ser clara y delimitada,
que incluya los detalles más resaltantes, recuerda que tú tienes una
información que el otro no posee y tu lector es muy probable que también. La exposición de los
puntos o las consultas que se requieren hacer deben ser lo más claro y
específico posible, de esta manera se le facilitará al lector comprender las necesidades que se
plantean para tomar decisiones y acciones de forma correcta, agregando valor al
tiempo de respuesta en que se desea obtener.
En toda comunicación debemos estar abiertos a esperar recibir preguntas,
inquietudes, ideas, preocupaciones, debiendo estar focalizados en dar
respuestas claras sin entrar en ambigüedades,
porque estamos generando confianza y seguridad en las personas; si estamos dubitativos debemos ser honestos e
informar que requerimos hacer consultas para tomar ciertas decisiones
informativas y comprometernos a la clarificación de las mismas en un tiempo
prudencial, nunca le restemos importancia a las dudas propias o de otros, porque
llegan a ser los detonadores de nuevos conocimientos e ideas.
En las empresas las acciones de respuestas rápidas y seguras
tranquilizan a las personas y les brindan confianza en sus líderes.
El que verdaderamente quiere comunicarse debe saber escuchar inclusive
el silencio, porque éste también forma parte de la comunicación.
Pensamiento:
“Para Comunicarse de manera efectiva, debemos darnos cuenta que todos
somos diferentes en la forma en que percibimos el mundo, y usar este
conocimiento como guía para nuestra comunicación con los demás”. Anthony
Robbins
Como complemento a este artículo, si aún no los has leído, te invito a
que leas mis artículos sobre ESCUCHA ACTIVA y EMPATÍA, ambos son necesarios en
la aplicación de la COMUNICACIÓN EFECTIVA.
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nuestra consigna es: Hacer el bien y sin
saber a quién!, ante dudas y comentarios puedes escribirme.
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