LA MOTIVACIÓN

Como la mayoría de mis artículos, éste no va a ser la diferencia, la motivación es totalmente aplicable para nuestro ámbito personal como el que desempeñamos laboralmente. Cuando hablo de la motivación me imagino una mano invisible que te sostiene, y que con argumentos válidos y de peso, te impulsa a llevar a cabo ciertas acciones para lograr un objetivo o meta propuesta, que al final de cuenta va a satisfacer la necesidad tuya como la de tu entorno.

Bajo los esquemas de la motivación se logran hacer cambios de comportamiento muy favorables por medio de los estímulos, que se perciben de forma interna al alimentar nuestros sentimientos y emociones, así como lo externo de acuerdo a lo que percibas en tu entorno y el avance sobre el cómo se van obteniendo los resultados finales.

Para obtener en nuestra mente el “yo quiero y yo puedo”, hace falta tener previamente la motivación suficiente para tomar acciones y hacer que nuestras actitudes y aptitudes se enfoquen en obtener todo aquello por lo cual nos esforzaremos en conseguir, pero ustedes se preguntarán ¿cómo podemos obtener esa motivación a partir de la nada?, la respuesta es muy sencilla: por medio de nuestros pensamientos. Nuestros pensamientos son los que logran trasladar nuestros deseos hacia la realidad, con imaginación y creatividad nos hacemos escenas en nuestra mente de cosas que pueden ocurrir, la diferencia estará en que utilices esos pensamientos de forma constructiva y no destructiva tanto para ti mismo como para tu entorno, porque cuando creas imágenes claras de los resultados finales de tus deseos sientes ese impulso que te indica las acciones que deberás llevar a cabo, y a partir de ese momento es que inicia la magia de la motivación, donde nace el enfoque de lo que queremos y las acciones que tomaremos para que eso que deseamos ocurra.

La actitud y disposición a querer accionar dependerá de uno mismo, incrementar el compromiso de que a pesar de las adversidades que siempre se consiguen en el camino, nuestra meta está clara y que es allí donde debemos llegar, así es como logramos la motivación desde lo más sencillo hasta las ambiciones más grandes. El límite no es el cielo, porque después de él existe un universo infinito de oportunidades, así que el que quiere sencillamente debe proponérselo y actuar, ahora sólo imagina todas las maravillas que puedes crear al motivarte por medio de tus pensamientos, ¿comprendes lo infinito que puede llegar a ser?, es poderoso verdad?. 
La autoestima, el conocerte a ti mismo, conocer el nivel de tus habilidades y destrezas, lo que te gusta hacer, lo que te hace feliz, son herramientas importantes para lograr tener la motivación suficiente de poner en acción tu cuerpo y mente y obtener todo aquello que deseas!.

En el mundo empresarial esto mismo ocurre, pero con más ayuda de la que tus pensamientos se pueden imaginar, porque los objetivos a alcanzar ya están presentes, y se logra a base del trabajo en equipo, por tanto entre todos se obtiene la frecuencia pensante necesaria para llevar a cabo las acciones en conjunto que pemitirán cubrir las necesidades de la organización. 
En un ambiente de trabajo idóneo, donde la participación de todos es respetada, valorada y aplaudida, genera esa motivación a querer hacer las actividades asignadas con más esmero y dedicación, aumentando nuestra eficiencia y eficacia, donde el reconocimiento al bien hacer está presente en cada rincón, donde el lugar al cual llamas “tu segunda casa” se vuelve acogedora; esto genera sentido de pertenencia, compromiso en el capital humano que es lo más valioso que tiene cualquier empresa; se puede garantizar que ese capital humano este bien, porque se ha promovido el sentido de pertenencia, porque sus jefes los respeta y son empáticos, porque saben que son escuchados y su participación es importante, porque tienen las herramientas para lograr hacer su mejor desempeño, y es que cuando la organización les provee conocimientos para desarrollar aún más sus habilidades y sus destrezas, el nivel de compromiso aumenta y su motivación a cumplir con los objetivos y cubrir las nuevas necesidades que se le presente a la compañía también.

En la medida en que usemos nuestros pensamientos positivos en conjunto con una actitud clara, empática y asertiva, con la convicción de ser parte siempre de la solución y no del problema, conseguiremos la suficiente motivación para impulsar nuestro comportamiento a querer hacer las cosas realidad, permitiéndonos aceptar las desavenencias para aprender de ellas. La verdadera motivación se encuentra dentro de nosotros mismos, si sólo ves oscuridad en tu interior es porque son tus pensamientos que te están llevando y manteniendo en ella, cambia la frecuencia, haz que afloren los mejores recuerdos que tengas y cuando comiences a ver la luz, cree en ti, en que eres un ser especial y que tienes todo para brillar, de cualquier sueño nace una meta, para llegar a ella sólo falta compromiso, disciplina y las ganas enormes de empezar a dar los pasos que son las acciones que te acercarán a ella.

Pensamiento:

“La motivación nos impulsa a comenzar y el hábito nos permite continuar”
Jim Ryum

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